jueves, 29 de octubre de 2015

El florecimiento!!

En estos días post- vuelta al trabajo me ha pasado algo que no veía venir... había escuchado eso de que los niños una vez que sus madres vuelven al trabajo, éstos demandan más atención de la madre una vez que regresan a casa. O que vuelven a despertar en la noche para tomar el pecho en demanda de las horas que estuvieron separados de sus mamá en el día. Esto me ha sucedido con mi hijo, yo como ya lo había leído, estaba mentalizada a ser más demandada por parte de mi cachorro.
Mi hijo es fantástico, me acordé de un capítulo del "Bésame mucho" de Carlos Gonzalez, donde menciona las características geniales de nuestros hijos, de lo buena persona que son, desinteresados, generosos etc. Y así lo he comprobado, mi hijo lloró solo un día en la sala cuna, se resfrió y aún así nos ofrecía una sonrisa hermosa y hacía su mejor esfuerzo por mantener el ánimo. trata de comerse toda la comida sin hacer nada de escándalo, pareciera que sabe cuando estoy post- turno y duerme conmigo siestas de 2 horas en esos días, mi hijo es tremendamente generoso y considerado, y con mi esposo se lo decimos todos los días.
Creo que mi hijo es el único capaz de amarme de forma total y absolutamente incondicional. Aún en mis peores días del inicio de nuestra aventura el me amó, sin importar las ojeras, "la cara de poto", la cara deslavada, él me mira como si yo fuera la mujer más bella que pisa la faz de la tierra y abre una boca grande y me besa con pasión desmedida, eso es amor, y yo me quedo corta tratando de devolverle todo lo que me da.
Lo que me pasa ahora, es que después de casi 7 meses de compartir con mi hijo, ahora me siento enamorada, hasta las patas, sin remedio alguno. 
Cuando nació Pedro yo tenía ciertas expectativas, pensé que todo sería felicidad máxima y absoluta. Me imaginaba con el niño en brazos y yo de pelo alisado y maquillada recibiendo a las visitas siempre digna con mi niño en brazos, soñaba con las bienvenidas y los asados.
Pero uno sueña muchas cosas y uno no sabe como será la realidad. Aún cuando estaba muy feliz de tener por fin a mi hijo con nosotros, mi reacción al principio fue muy distinta a la que imaginé. Le contaba a una buena amiga que si hubiese podido cavar una madriguera para estar con mi hijo y esposo, lo habría hecho. Sentí una necesidad muy grande de intimidad, de refugio, de penumbra. Deseaba estar sola con mi pareja y mi hijo y empaparme de todas estas sensaciones nuevas. No sentía la necesidad de ninguna compañía en especial, ya no quería los asados, ni alisarme el pelo, ni recibir gente, me sentía sumergida en esta dimensión nueva y no quería ninguna distracción. Este periodo fue súper complejo porque no fui comprendida, se confundió mi necesidad de conectarme conmigo misma con egoísmo y creo que aún me duele eso. Nunca pensé que este viaje comenzaría cuesta arriba. Me sentía muy cansada, pero no me sentía cansada de mi hijo, sino de esa impotencia de no conocer aún sus necesidades, y uno piensa "cómo si salió de mi, no voy a poder saber que le pasa o que quiere". 
Gracias a Dios el tiempo pasa y no en vano y con mi hijo nos conocemos mejor, yo me siento más cansada que nunca ahora que volví a los turnos, pero mi cuerpo ya se acostumbro a las pocas horas de sueño y ahora las "cara de poto" aparecen menos que antes. Después de esa fase de introspección, donde logré conectarme con la mamá en latencia que tenía dentro de mi y donde logré perdonar las heridas de la infancia y  quedar en paz con mi pasado para poder enfrentar el futuro, viene esta fase de florecimiento, donde por fin logro  disfrutar plenamente de la maternidad. Mi hijo es extraordinario, despierta en la noche casi más que antes, pero parece que sabe que nos necesitamos, hoy pensaba que es él quien me acurruca a mi, me hace ver que todo estará bien, que él entiende mi ausencia en estos días y sabe que cuando vuelve a casa yo hago mi mejor esfuerzo por compensar el tiempo perdido.
Estoy totalmente enamorada, veo sus ojos y simplemente no hay palabras que puedan describir la intensidad del amor que siento por  mi hijo, y me sorprendo porque no pensé que cabía tanto amor en mi. Le doy las gracias a  mi esposo que con el tiempo ha logrado sintonizarse  conmigo y ahora hemos pasado este periodo de adaptación a la vuelta al trabajo sin grandes sobresaltos. Siento que esta nueva etapa ha sido mucho más gratificante de lo que pensé. Me siento contenta de por fin sentirme a gusto con mi papel de  mamá, tengo menos culpa, menos incertidumbre, más confianza, más satisfacción.
Gracias  a mi hijo por ser mi mejor lección de vida, has logrado por fin empezar a sacar lo mejor de mi. Una amiga me advirtió que este viaje sería difícil, pero que al final me encontraría con  una persona nueva. Estoy recién empezando y me encuentro ansiosa y dispuesta a recorrer el camino con los hombres de mi vida.
Con mi hijo nació una mujer distinta, más compasiva, reflexiva, un poquiiiiito más calmada y relajada (aún me tira lo capricornio), menos perfeccionista, más entregada a la incertidumbre de la vida misma, sólo a aferrada al amor de mi familia, lo demás son puros flecos....
Obra de Nicoletta Tomas Caravia, obteindo de la web

domingo, 25 de octubre de 2015

caidas en los niños ¿qué puedo hacer?

Como mamá primeriza uno de mis mayores miedos es que a mi hijo le pase algo, y este miedo viene y se queda con nosotros desde el momento en que sabemos que estamos esperando un bebé. Debes cuidar el peso, la alimentación, todo el mundo anda atento que no te caigas, que no te canses, que no hagas fuerza, etc etc.
Y una vez nacido el bebé empieza el miedo de verdad, primero la muerte súbita, no aplastarlo en la noche si dormimos con él, que respire, que no pase frío, ni calor, en fin, uno va pasando etapas de miedo, y cuando ya superaste el miedo a aplastarlo con la pechuga, tu hijo aprende a darse vuelta y ahora se puede caer, después aprende a llevarse las cosas a la boca y se puede atragantar, ufff y así hasta que tenga unos 25 años jajajaja.
Pero por mientras no nos queda más que identificar, prevenir y aprender a reaccionar a aquellos eventos que son más comunes en nuestros cachorros, para así no tener un ataque de nervios al momento que nuestros hijos tengan algún accidente y necesiten nuestra asistencia.
Para que tengas una idea, en los niños mayores de un año los accidentes es la mayor causa de mortalidad en los niños, siendo los accidentes de tránsito, los incendios y los ahogamientos, los más comunes. Por otro lado, las causas más frecuentes de lesiones en niños son las caídas, quemaduras y los envenenamientos.
Como podemos ver las posibilidades son varias, pero en esta oportunidad me enfocaré en las caídas en general. 
Primero que todo, debemos tomar en cuenta que los accidentes se producen con mayor frecuencia en la mañana cuando la familia se está preparando para salir de casa, o en la tarde cuando se esta preparando la once y todos ya están más cansados o de mal humor. La época de verano también tiene más riesgo porque los niños salen más al aire libre y están más expuestos a los accidentes (pero no te preocupes, aún es mejor que salga al exterior a que se quede pegado en la tablet jaja), además se ha demostrado que cuando los padres o cuidadores están más estresados o con problemas personales, esto influye en su capacidad de cuidar y reaccionar ante algún accidente.
En lo personal soy mamá primeriza, y más encima Enfermera, por lo tanto mi nivel de preocupación y sobreprotección es más o menos elevado, sin embargo, debo (y debemos) comprender que los niños, necesitan explorar, experimentar y descubrir el mundo a su alrededor, esto tarde o temprano les causará un mal rato ya que  los niños más pequeños no distinguen entre diversión y peligro. Por otra parte, los niños de hoy son muy activos y aprenden muy rápido, por lo tanto siempre la primera indicación y la regla primordial en cuanto a seguridad, será la supervisión de nuestros niños por parte de un adulto responsable.
Creo además que hoy en día no debemos subestimar a nuestros hijos, estos chiquillos entienden más de lo que creemos y nos pueden sorprender, así que explícales que es peligroso y seguro, dale el ejemplo, recuerda que los niños siempre imitan lo que ven y recuérdale de vez en cuando los conceptos, dile que cosas puede y no puede hacer y porqué.
En los primeros meses donde tu hijo no es capaz de entender tus explicaciones, sólo queda la alternativa de vigilar siempre al niño, dejarlo en lugares seguros, como una cuna o un corral, para evitar el riesgo que el niño se de vuelta y ruede cama abajo o sofá abajo, al momento de mudarlo o bañarlo procura tener todos los materiales a mano para no dejar NUNCA al niño sólo.
Una opción que yo le copié a una amiga, fue que mandé a hacer una colchoneta de espuma, con un género infantil con hartos colores y que por debajo lleva cuerina de un color ad-hoc. La hice bien grandecita, y así puedo dejar a mi bebé en el piso, sobre esta colchoneta, donde puede moverse libremente (por ahora, sólo tiene 6 meses) y por lo menos no tiene riesgo de caerse y es una buena manera de estimularlo.
Imagenn Obtenida de la Web
Cuando los niños son más grandes debemos restringir el acceso a algunos lugares y en el caso específico de las caídas, las escaleras son un lugar relevante. Se hace necesario habilitar rejas de seguridad (arriba y abajo) para evitar que nuestros pequeños se lastimen en éstas. Además se debe mantener las escaleras libres de juguetes y objetos que nos pudieran hacer tropezar con el niño en brazos.
Evitar cables que queden en muebles y que el niño pueda tirar, y que arrastre algún objeto que lo pueda golpear. Así mismo se debe tener cuidado con los cajones y muebles ya que siendo más grandes los pueden abrir y también se podrán trepar.
Si vives en departamento debes instalar mallas o rejas en los balcones, poner seguros en las ventanas y puertas, esto último aplica en todas las casas y departamentos. usar siempre los cinturones de seguridad de la silla de auto, sillas nido y sillas de comer.
También se debe tener precaución con el hecho de que los niños comienzan a tener curiosidad por ir al lugares nuevos y además quieren hacer cosas solos por lo que se debe tener cuidado con la puerta de la casa, y piezas donde no quieras que el niño entre sin supervisión.
Cuando ninguna de estas medias funciona y algún accidente ocurre, debemos estar preparados. Primero debemos tratar de mantener la calma, una manera de lograr esto podría ser anotar los números de teléfonos de urgencias en un lugar visible y con letras grandes, el numero de tu plan cuadrante, ambulancia, bomberos, y ahora descubrí el numero de "Salud responde" del Minsal, que es el 600 360 77 77, donde puedes llamar y recibirás asistencia de un médico para aplicar primeros auxilios en caso de emergencia. Tener estos números importantes a mano e ayudará a reaccionar mejor ante una eventualidad.
¿Qué pasa si nuestro hijo se cae y se golpea? bueno, primero identificar donde se pegó y si hay lesiones visibles, como cortes,heridas o fracturas, si es sólo contusión aplicar compresas frías o hielo (en una bolsa y envuelto en un paño, nunca directo por el riesgo de quemadura por frío), es muy práctico tener en casa estos famosos "gel pack" que se pueden enfriar o calentar según necesidad, los puedes tener en el refrigerador listos para usar, y son mas flexibles y se pueden amoldar al lugar afectado.
el frío se coloca de forma intermitente por al rededor de media hora, para reducir el dolor y la hinchazón.
Si el golpe fue en la cabeza y fue muy fuerte, llevar al niño siempre a la urgencia más cercana. Mientras duerma despierte al niño cada dos horas para asegurarse que el niño esté consciente.
Un niño que haya perdido la consciencia, aunque sea por unos instantes, o que presente vómitos o náuseas, debe ser llevado en forma urgente a un centro asistencial. En estos casos se debe tener mucha precaución al momento de movilizar al niño, no sabemos que tipo de lesiones pueden haber sin que lo notemos, así que debemos movilizar al niño con 2 personas y en bloque, sujetando muy bien la cabeza y el cuello, para no agravar posibles lesiones cervicales.
No dar nada por boca, ni siquiera agua, hasta asegurarnos que el niño esta en buenas condiciones.
También deberías acudir a un centro asistencial si

    • Si tiene un sangrado que no se detiene aplicando presión.
    • Si convulsiona.
    • Si tu niño está respirando pero no te responde, está inconsciente después de la caída o no lo puedes despertar después de que se durmió.


Lleva a tu hijo a la sala de emergencias de tu localidad o habla con su médico de inmediato si notas cualquiera de las siguientes situaciones: 



    • Señales de que se rompió un hueso como una deformidad que salta a la vista, una torcedura que se ve muy rara o un brazo o una pierna que parecen fuera de su alineación normal.
    • Señales de una posible fractura de cráneo: un área que se siente suave, inflamada en el cuero cabelludo, especialmente si está en un lado de la cabeza (arriba o atrás de la oreja), sangre en la parte blanca de los ojos o líquido rosa o con sangre saliendo de la nariz u oído.
    • Señales de que sufrió una conmoción como vómitos persistentes o demasiada somnolencia. Dependiendo de su edad, observa si hay cambios en su forma de gatear o caminar, o si está mareado, presenta debilidad o confusión o problemas para hablar, ver o en sus habilidades motoras.
    • Señales de una posible lesión cerebral como cambios en el tamaño de la pupila y movimientos inusuales de los ojos.
    • Llora o grita por mucho tiempo. Eso podría indicar una herida o hemorragia interna.

Finalmente es muy importante que confíes en tu instinto, tu conoces mejor que nadie a tu hijo, si después de una caída tu hijo no actúa como lo hace normalmente, llévalo al centro asistencial. Por otro lado recordar siempre que lo principal es la prevención y mantener a nuestros hijos siempre a la vista para poder reaccionar prontamente ante un accidente, ahora recuerda que todos los niños se caen y la mayoría de estas serán inofensivas, no actúes de manera exagerada con todas las caídas de tu hijo, ayúdale a sobreponerse y a levantarse nuevamente y seguir jugando.


jueves, 22 de octubre de 2015

Vuelta al trabajo, Reflexiones..

De seguro es muy pronto para sacar conclusiones de este proceso de volver a trabajar, sin embargo, creo que uno se hace ciertas expectativas con respecto al tema (la mayoría negativas) y creo que es justo compartir un poco de lo vivido.
Tenía mucho susto de volver al trabajo, después de 10 meses de total ausencia del hospital donde trabajo, es duro volver por varios motivos. De partida era obvio que encontraría muchas cosas nuevas, volví a trabajar a un lugar que no era el lugar donde trabajaba cuando me fui, del personal, conozco solo a la mitad de las personas y me convertí en la más vieja del servicio jaja..
Sin embargo, al contrario de lo que podría pensar me sentí a gusto volviendo, sólo ahí me dí cuenta de que en el fondo (bien en el fondo), echaba de menos el trabajo. En mi caso, echaba de menos tirar la talla con los pacientes, conocer sus historias y ayudarlos en lo que pueda. Debo decir que estoy muy agradecida porque me enviaron a un lugar donde tengo pacientes estables, lo cual me permite bajar a la sala cuna a ver a mi hijo para amamantarlo y en los turnos de noche me puedo extraer leche sin ningún problema.
Lo más complejo finalmente ha sido acostumbrarme a los horarios, ahora entro a mis turnos una hora más tarde, pero en realidad no se si es mejor, igual debo llegar muy temprano para poder estacionarme. Terminaron los días en que me quedaba acostada con mi hijo hasta las 11 de la mañana, ahora despertamos a las 6, comenzaron de nuevo mis turnos de noche, hasta ahora no ha sido gran problema, un poco más de sueño tal vez, pero mi hijo es tan considerado, que el turno anterior nos mandamos una siesta de casi 3 horas en la tarde jaja... así da gusto. Y bueno, eso es lo principal, como anda el niño, si él esta bien tú también lo estarás. Mi hijo fue 3 días a la sala cuna y se enfermó, esta con  un cuadro gripal que por primera vez le ocasionó alza de temperatura, pero ahora ya esta mejor, me digo de consuelo que es mejor que conozca a los bichos del jardín para que se acostumbre jaja, pobrecito. El no echa de menos, no llora cuando nos vamos, el único problema fue que no quería tomar mamadera en la sala cuna, a pesar de que era leche materna, pero con el correr de los días ya esta más acostumbrado y ahora se ha tomado casi toda la leche. Los días que no tengo turno sólo lo llevo medio día, para que enganche con las rutinas del jardín. Para contrarrestar eso, cuando llegamos a casa, me dedico full a él, le hago todos los mimos del mundo, le doy todos los besos del universo y lo premio con todas las tetas que quiera. He podido comprobar que es verdad que cuando entras a trabajar, el niño te demanda más cuando vuelves, mi hijo, volvió a despertar en las noches, pide teta una o dos veces, extrañamente para mi ha sido lindo eso. Me pasó que cuando dejó de tomar teta en la noche, me dio pena, era como esa sensación de que estaba más grande, que ya no me necesitaba tanto (es bien tonto, pero así me sentí), ahora cuando despierta en la noche, lejos de molestarme, me levanto contenta a sacarlo de su cunita y lo acurruco a mi lado, le ofrezco mi pechuga con el sabor que él quiera y compartimos esos momentos tan deliciosos de complicidad e intimidad que tanto me gustan, nos abrazamos y dormimos juntitos un ratito, sueño? sí tengo más sueño, pero es diferente ahora. Creo que ahora me doy cuenta que me hacía falta volver, a pesar que los días se pasan volando, que tengo menos tiempo, y ahora si que duermo menos, ando hasta de mejor ánimo. Me siento útil, no debería decir eso, pero esa es la sensación que tengo, los días se me hacen más cortos. Los días de post -natal se hacen eternos!! ahora en las horas que mi hijo esta en la sala cuna, mi cuerpo no descansa, pero mi cerebro sí, eso de estar pendiente las 24 horas del día del bebe es muy agotador. Ahora igual cuando no esta pienso en él todo el rato, pero estoy tranquila de que esta bien cuidado y que son sólo algunas horas.
Imagen Obtenida de la web
Creo que en este proceso he ganado hasta ahora, el que más ha sufrido (aunque no lo reconozca) es mi esposo, porque sus horarios ahora sí se han visto mucho más afectados, él tiene que hacerse cargo del niño cuando yo no estoy y eso incluye los turnos de noche, pero mi esposo es muy aperrado, y ha estado a la altura de las circunstancias. Aún nos queda acostumbrarnos más a esta dinámica de los dos papás trabajadores y el bebé, pero creo que hasta ahora ha sido mucho mejor que lo que creíamos, estoy segura que los dos en nuestra cabeza pensamos que sería un poco desastroso todo, pero al contrario, ha sido cansador pero satisfactorio.
Hoy me siento más tranquila y menos culpable, casi veo en los ojos de mi hijo un "oye vamos no más, si vamos a estar bien"

viernes, 16 de octubre de 2015

Lactancia materna: Dar teta no es fácil!!

Al momento de nacer nuestro primer hijo, todo el mundo te da consejos sobre cómo “enrielar” a tu hijo y moldearlo de acuerdo a las necesidades de la familia, y no de acuerdo a las necesidades del bebé. Sé que es ñoño pensar que leer un par de libros o artículos te hagan llegar al nirvana de la crianza respetuosa, y yo me rio sola, porque hasta ahora sí, la crianza ha sido respetuosa, pero mi hijo tiene apenas 6 meses y nos quedan muuuchas pruebas que pasar. Pero creo que una vez más debo  decir que le debo mucho a los libros que he leído que (insisto) no enseñan a criar, sino que enseñan a comprender el comportamiento de los recién nacidos y de los niños dándonos una perspectiva que la rápida, egoísta y estresante vida actual no nos permite apreciar, volver a mirar la crianza  y a nuestros hijos con ojos más amorosos y con menos expectativas.
Yo en este momento estoy enfrentada al asunto de la alimentación complementaria, la vuelta al trabajo y la titánica tarea de mantener una lactancia materna exitosa. Y ha sido bien interesante.
Voy a utilizar un poco de lo que el Gurú Carlos González nos habla sobre la lactancia materna, mezclándolo un poco con mi experiencia con esto de amamantar a mi primer hijo.
De partida creo firmemente que en la lactancia materna hay que utilizar la “ley de la atracción”, visualízate amamantando a tu hijo estando embarazada, dile a tu cuerpo que está diseñado para esto, una actitud ganadora es primordial en este asunto, la lactancia en un proceso hormonal, gatillado por las emociones, si estas preocupada de NO tener leche…ya sabes que va a pasar.
Yo jamás me cuestioné el asunto de la lactancia, siempre creí que no iba a tener problemas para dar leche. A mi doctor le mencioné que para mí era  importante el apego al nacer, y afortunadamente y a pesar de que mi hijo nació por cesárea, el apego fue increíble!. Al salir de mi guatita me dejaron abrazar de inmediato a mi hijo, después de uno 10 minutos recién mi esposo cortó el cordón, y después de eso nuevamente lo colocaron en mi pecho, hasta que la intervención terminó.
Mi hijo nació con bajo peso, por lo cual tenía controles de glicemia más seguidos para evitar hipoglicemias, hasta ese entonces yo no veía ni señas de tener leche y si apretaba mis pezones salía calostro muy escaso, pero aún así, nunca dudé. Estando en recuperación solicité de inmediato que me trajeran a mi hijo, y antes de tener una hora de nacido ya estaba tomando teta, no sabía si estaba realmente tomando algo, pero confiaba en que mi hijo sabría estimular lo suficiente para obtener lo que quería. Debemos confiar en nuestro hijo!
Él sabrá pedir cuando tenga hambre, sabrá cuanto tiempo mamar, de que pechuga quiere tomar, etc. En la clínica me dieron algunas “directrices”, como darle teta 15 minutos por lado, cada 2 horas y todo eso. Sin embargo mi instinto me hizo no hacer mucho caso de estas indicaciones.
No quise que Pedro fuera a la sala cuna de la clínica en las noches, todos me decían que aprovechara para descansar, pero  la verdad esperé tanto a mi hijo que ahora que por fin había llegado, lo último que quería hacer era descansar de él. Por el contrario desde el comienzo me propuse aprovechar ese tiempo para establecer nuestro nexo mamá – hijo y le di toda la teta que pude.
La última noche, decidí enviarlo a la sala cuna de la clínica y me arrepentí profundamente, dormí rico como 3 horas, el resto de la noche estaba pensando en él. Más encima les dije que si lo veían con hambre me lo trajeran de inmediato. En lugar de hacer caso, le dieron relleno sin mi consentimiento. Pfffff
Mi hijo hizo una hipoglicemia el último día, así que ahí fue necesario darle un poco de suero para regular su glicemia, ese era el tercer día post parto, todavía ni rastros de leche y yo aún no dudaba.
Al día siguiente me dieron de alta y nunca pregunté cómo preparar relleno, ni que tarro de leche podría comprar ni nada de eso. Ese día, el cuarto post – parto, tuve una bajada de leche descomunal, tanto así que mi esposo tuvo que correr a comprar un extractor de leche.
Los niños no tienen horarios, al menos no al principio así que no sacas nada con estresarte y hacer caso de los horarios, o eso de los minutos por teta, los niños al principio se demoran más en tomar leche y con el correr de los meses en 3 minutos te dejan seca, se transforman en unos expertos en succión. Los niños eligen sus horarios propios porque así consiguen modificar la composición de la leche a su gusto. Lo mejor es hacerse la idea de que la cosa esa demanda, y es a demanda del niño, no de la madre!, yo me hice la idea de que esto sería cansador al principio y seguí adelante, el primer mes fue del terror, mi hijo demandaba teta a cada rato, mis pechos me dolieron mucho (mucho!) las primeras 3 semanas, me salió llanto un par de veces, no dormimos mucho con mi esposo, pero continuamos con la lactancia a libre demanda.
Tooooooodo ese cansancio se esfumo cuando en el control del primer mes nuestro hijo había subido 1,6 kilos!!, me sentía tan orgullosa, nuestra familia había hecho un gran trabajo!!
Lo que me ayudo mucho fue leer sobre lactancia materna antes, porque la lactancia materna es un arte, no es nada fácil y tiene muchos desafíos en el camino y si no estás informada y te dan malos consejos, terminarás dando fórmula antes de tiempo y en forma tal vez innecesaria. Me refiero específicamente a los “brotes de crecimiento” y a las “crisis” de lactancia.
Resulta que en la primera parte la producción de leche es un poco más desordenada y para los 15 -20 días es el momento donde uno más leche produce, llegando incluso a un litro y medio por día. Sin embargo, el niño va creciendo y por lo tanto va a necesitar aún más leche, la única manera de aumentar la cantidad de leche que producimos es aumentando la cantidad de tomas, por lo cual el bebé en estos días demanda más el pecho y la mamá puede creer que el bebé queda con hambre o que su leche no lo alimenta. Tranquila, tu hijo sólo esta regulando la cantidad de leche que necesitará para seguir creciendo.
Imagen obtenida de la web

Otra pequeña crisis es a las 6-7 semanas de vida (y esta sí que la viví como de libro!) otra vez el niño demanda más el pecho, pero además el niño llora al mamar, o se pone nervioso, tira la teta o se tensa al tomar el pecho. Al parecer además del aumento de leche necesario, existe un cambio en la composición de la leche que hace que cambie de sabor por un tiempo y eso puede disgustar al bebé, esto puede durar una semana.Y después viene la crisis de los 3 meses que es más marcada, donde se observan los siguientes fenómenos:
  • ·         El bebé ya no mama tan a menudo, hay más espacio entre las tomas. (no tiene hambre?, no quiere mi leche?)
  • ·         El bebé que antes se quedaba prendido de la teta por largos minutos ahora dura 3 o 5 minutos y no quiere más teta plop!
  • ·         Ya no tienes esa sensación de los pechos llenos de leche, y puede que ya no sientas la “bajada” de la leche como antes. Sientes los pechos más blandos. (ya no tengo leche??)
  • ·         Cuesta más amamantar al bebé, se distrae, llora, etc. y parece que sólo toma leche tranquilo cuando duerme.
  • ·         Se regula el peso, y el bebé engorda menos que los primeros meses.
  • ·         El bebé se chupa o más bien se devora la mano con un gusto que da miedo, se puede interpretar como signo de hambre.
  • ·         Disminuye la frecuencia de las deposiciones (caca), antes hacia todos los días incluso varias veces al día y ahora, hace cada dos o tres días.

Todas estas situaciones tienen explicación. A los 3 meses los niños se vuelven expertos es mamar y es por eso que en minutos extraen todo lo que necesitan. A esta edad también la visión y audición del bebé se desarrollan de forma espectacular, por lo cual ahora ven y escuchan más allá de la mamá y se distraen con todo. El cerebro de tu bebé está funcionando a mil por hora!.
Por otro lado el cuerpo de la mamá es muy sabio y para regular la producción de leche se demora un poquito más para no producir “leche de más”, en promedio la bajada de leche ahora demora 2,2 minutos,y esos minutos para nuestro bebé son eternos, y se ponen a llorar. Y bueno los niños regulan su peso, si subieran lo mismo siempre al año serían enormes!!!
Estas situaciones pueden confundir a los padres y finalmente algunos deciden dejar la lactancia materna de manera errónea y comienzan a dar fórmula.
Algunos consejos para superar esto es no insistir demasiado, dale tiempo a tu hijo, él aceptará el pecho cuando lo necesite. Dar pecho en penumbra y en una habitación más tranquila, en este punto un poco de comprensión con la madre por fa!. A mí me salió pelea con esto, fui acusada de “mala onda” y de no querer “compartir al niño” por no dar teta en una habitación llena de gente. Filo, la mamá eres tú y debes sentirte cómoda y así además evitas comentarios del tipo “y porqué llora tanto?”, “debe quedar con hambre”, etc, etc, etc. De pasadita recomiendo no sentarse al lado a observar como amamanta una mamá, es de mal gusto, ponen nerviosa a la madre y desconcentran a la guagua; en mi opinión el único que puede hacer eso es el padre, una cosa es que tú amamantes en cualquier lugar, pero los demás por favor sigan con lo suyo. Mejor tráigale un vaso de jugo a la mamá y la hace de oro!!
Lo más importante es confiar en tu capacidad para alimentar a tu hijo, no creer en los mitos, infórmate, así cuando alguien te diga algún comentario innecesario y desubicado, tendrás el fundamento científico para rebatirlo. No existen mamás con poca leche o mala leche. Tu eres perfecta para tu hijo y punto!!


Fuente: "Mi niño no me come", Carlos Gonzalez.
Crisis de lactancia, Alba, lactancia materna.






domingo, 11 de octubre de 2015

Vamos a tener un bebé, como se lo explicamos al perro??

Una de mis mayores preocupaciones durante mi embarazo fue cómo reaccionaría nuestro perro a la llegada del bebé.
Nosotros tenemos un hijo perro llamado Rocco de 4 años de edad, es un Golden Retriever, una raza conocida por ser dócil y amorosa sobre todo con los niños. Cuando lo compré vivía sola y por lo tanto estuvimos mucho tiempo viviendo los dos sin más compañía, y cometí el error de no hacerlo socializar mucho con otros perros o gente, lo cual ahora me pesa demasiado pues nuestro pobre Rocco no se siente cómodo con personas ajenas a la casa y menos con otros perros.
Mi esposo tiene una hija, que cuando conoció a Rocco tenía 11 años, a Rocco le costó casi 6 meses aceptarla, ahora por supuesto la adora y se derrite cuando la ve, pero fue un trabajo duro, menos mal Camila tuvo la paciencia y la perseverancia necesaria para que Rocco se acostumbrara a su presencia en nuestra casa, ahora son dos hermanos adorables.
Mi primera sorpresa con Rocco fue que me di cuenta que él sabía que yo estaba embarazada. Buscando información averigüé que los perros pueden percibir los embarazos. Rocco vive fuera de casa, pero cuando me embaracé le gustaba estar más cerca nuestro, así que le dejábamos pasar al living de la casa para que pudiera estar más cerca, conmigo se puso más “mamón”, quería estar cerca mío y se acercaba a mi panza y ponía su oreja, un día estaba yo sentada en el sofá de la casa y él se subió encima (cosa que normalmente nuca hace) y se quedó en mi regazo por un rato, ahí ya me quedó claro que Rocco sabía que venía un hermanito en camino.
Y empezamos a averiguar que se debe hacer para que la  llegada del bebé no sea una amenaza para el perro y que la transición sea más amigable.
Cuando ya estaba muy embarazada, le hablaba a Rocco y le explicaba que venía un bebé en camino mientras le hacía cariño, y cuando comencé a lavar la ropa del bebé se la mostraba y se la acercaba para que oliera el aroma del detergente del bebé.
También es importante que el perro tenga su control veterinario al día,  nosotros llevamos a Rocco para que lo examinaran y se puso al día con sus vacunas y antiparasitarios, para evitar cualquier problema posterior.
En nuestro caso Rocco hace su vida fuera de la casa, por lo que el tema del territorio no fue problema, si tu perro duerme contigo, es mejor cambiarlo de lugar paulatinamente  antes del nacimiento del bebé para evitar los celos. Se debe familiarizar con las cosas del bebé, como la cuna, las sillas mecedoras, coches, etc. Además debes enseñarle al perro a no meterse en la habitación del bebé.
Considerar el entrenamiento como una alternativa. Si tienes los recursos es bastante útil para enseñarle algunas órdenes básicas que te pueden ayudar al momento de compartir con el bebé y tu perro.
Cuando nació mi hijo y yo estaba en la clínica, mi esposo iba todos los días a casa a ver a Rocco y lo sacaba a pasear, es importante que el perro no se sienta solo esos días que estas aún hospitalizada, para que esté más tranquilo cuando llegues a casa.
Mientras estas en la clínica, dile a tu pareja o a quien te acompaña en el proceso que le lleve una mantita que huela a tu bebé, para que el perro tenga una idea de cómo es el olor del nuevo integrante de la familia.
Imagen Obtenida de la Web

Lo ideal es que alguien saque al perro a pasear mientras tú llegas a casa y te instales con el bebé. Así el perro se relaja y tú también. En mi caso llegamos solos así que mi esposo entro con el bebé, y yo salude al Rocco sin el bebé para que se calmara un poco. Durante este proceso es mejor que el perro este amarrado por cualquier eventualidad. Una vez que los dos saludan al perro puedes acercarlo al bebé de a poco y le puedes ir premiando si se está portando bien.
Trata de no retarlo, esto hace que el perro asocie al bebé con algo negativo y esa no es la idea, si hace algo mal, aléjalo y con voz seria pero calmada espera a que se relaje y vuelve a intentar (es difícil esta parte, uno se pone más nerviosa y tiende a ser más gritona, pídele apoyo a tu pareja o alguien más).
Observar siempre su actitud, y estar atenta a sus reacciones, obviamente no debes dejar a tu perro o cualquier mascota con tu bebé sin la supervisión correspondiente.
Lo otro que para mí es más complicado, es dedicarle tiempo al perro, antes yo lo bañaba, le hacía más cariño, etc. Obviamente con el bebé (que además nació en invierno), no tengo mucho tiempo para mimarlo como antes, mi esposo ahora se hace cargo de todo el cuidado del Rocco. Ahora que están los días más bonitos, y mi hijo más grande, espero poder recuperar ese tiempo perdido con mi hijo perro. Por ahora ya comenzamos a salir a pasear al Rocco todos en familia, eso ayuda al Rocco a compartir más con el niño y asocia al bebé con algo positivo.


Espero les sirvan estos tips básicos para que la llegada del hermano menor, no signifique un drama para nuestros hijos perrunos, ustedes tuvieron algún problema?, algún consejo que quieran compartir?

viernes, 9 de octubre de 2015

Rompiendo Paradigmas, lactancia y vuelta al trabajo

Tengo que escribir esto!. Pasado mañana vuelvo al trabajo, con sentimientos ultra encontrados. Por una parte se que esta bien, tengo mucho que entregar como profesional y el hecho de ser madre le dará un matiz distinto a lo que hago como Enfermera, sin duda alguna. Por otro lado es difícil no sentir que estás abandonando a tu hijo por culpa del lucro y el egoísmo. Lo dejas porque tú también eres importante y lo dejas porque hay cuentas que pagar.
Y bueno, para volver sin tanto drama, empecé hace rato a preparar todo para volver. Inscribir al niño en una sala cuna, en este caso en el  mismo hospital donde trabajo . Esta sala cuna no es un lujo, pero el tener a mi hijo al lado cuando estoy en turno, es absolutamente impagable, las tías son muy amorosas y tienen un horario que obviamente se adapta a los horarios loquillos de las Enfermeras.
Pero una de las cosas que más me preocupaban era como continuar con la lactancia materna. Yo he sido muy afortunada de tener una lactancia materna exitosa (como sabrán es un poco complicado al principio, pero una vez agarrando el ritmo es totalmente maravilloso). Yo desde que mi hijo nació inicié un "banco de leche" que me permitía dejar a mi hijo con alguien mas sin tener que recurrir a fórmula o tener que volver a cierta hora para amamantar.Tomando en cuenta que mi hijo nació empezando el invierno, esto fue grandioso porque yo podía salir sin tener que exponer a mi hijo al clima frio, lluvioso y muy contaminado del sur de Chile.
Además me compré un extractor de leche eléctrico para sacarme leche en el trabajo los fines de semana o en los turnos de noche, donde no tendré a mi hijo en la sala cuna.
Imagen obtenida de la web
El asunto es que mi hijo no solo irá cuando tenga turno, sino que también irá los otros días medio día al menos. Pero yo no estaré cerca para darle leche. Hable con la tía de la sala cuna para preguntarle como podía yo llevar mi leche congelada, pero para mi sorpresa ellos no estaban preparados para manipular o administrar leche que viniera de afuera del recinto. 
El primer día de "adaptación" de mi hijo eran sólo dos horas por lo que no necesitaría leche, sin embargo, cuando lo fui a buscar, la tía me dijo "se tomó 30 cc no más de leche, no quiso el resto", casi se me cae el poco pelo que tengo y le dije "tía, mi hijo JAMÁS había tomado relleno!!". Tenía una mezcla de rabia (le había comentado en varias oportunidades que mi hijo estaba con lactancia materna exclusiva), pero lo que más sentí fue pena, llevo 6 meses haciendo un esfuerzo enorme, dando teta a demanda, despertando al principio cada 2 horas para dar leche, sacándome leche a las 4 de la madrugada, rotulando bolsas, educando a mi familia sobre la mantención de la leche y la cadena de frío, aguanté el dolor de tetas las primeras 3 semanas y me doy vuelta y a mi hijo le dan una mamadera con relleno??!!, la verdad quería llorar, incluso pensaba  que esto también va dentro de la crianza respetuosa, no puedes de repente cambiarle a un niño su forma de alimentarse sin preguntarle a la madre primero. Pero no dije nada, era el primer día y no quería quedar de conflictiva y busqué como solucionar este problema. Primero hablé con la directora del Jardín, pero no podía darme una solución, ya que sus alternativas significaban arriesgarme a que la leche no llegara en condiciones óptimas a mi hijo. Entendí su posición.
Muy preocupada decidí llamar a la encargada de las leches del hospital donde trabajo. Y aquí viene lo que me tiene esperanzada de la raza humana jaja. Traté de explicar lo mejor que pude todo el cuento, y ella me interrumpe y me dice "lo que tú quieres es traer tu leche acá para poder dársela lista a tu bebé cuando tú no estés cerca". sí, le contesté. Y ella muy amable me dice "yo soy pro - lactancia, y te ayudaré en todo lo que pueda". Cuento corto, me autorizó para llevar la leche directamente a la central y de ahí preparada llegará a mi hijo, con todos los cuidados máximos que requiere.
Ella me mencionó que comentó con varios colegas esta situación y al parecer es la primera vez que una mamá solicita este tipo de ayuda para seguir con la lactancia materna en la sala cuna del hospital. Ojalá más mamás se atrevieran a continuar su lactancia materna en el trabajo, yo creo que es complejo, hay que buscar los ajustes y hay que tener paciencia y mucha disposición, pero se puede!
Me siento tan contenta por las dos, yo me siento orgullosa de no quedarme con la primera opción de ir dejando de a poco la lactancia en contra de nuestra voluntad (la mía y la de mi hijo) y me siento contenta por ella, por Carolina al romper el paradigma, al estar dispuesta a cambiar las cosas se abre una puerta que ahora es muy pequeña, pero que con el tiempo se podría transformar en una hermosa iniciativa.
Ahora me declaro totalmente lista para volver a trabajar!!

martes, 6 de octubre de 2015

Limpio pero no estéril, la hipótesis de la higiene

Yo me confieso maniática de la limpieza y el orden. Me gusta todo impecable, brillante; con olor a limpio. El cloro y el lysol son mis "amiguis" y mi esposo me molestaba cuando pololeabamos porque decía que mi casa parecía "casa piloto" jajaja, yo lo veía como un cumplido.
Esta situación se vuelve un problema cuando vas a tener un hijo. Tienes que asumir que el orden y la limpieza se comienzan a ir a las pailas en forma sistemática. Yo  aún me niego y trato de hacer esfuerzos por mantener mi casa limpia y ordenada.
Pero por otro lado esta todo lo relacionado con la limpieza de las cosas del bebe, desde el chupete, la ropa, los juguetes, las mamaderas, el extractor, la guagua misma!!, en fin y cuando te gustan las cosas limpias, este es un desafio mayor.
Y con mi esposo hemos hablado mucho esta semana sobre este tema, ya que un amiguito de mi hjo estuvo lamentablemente hospitalizado por cuadro viral parecido al rotavirus. Y salió el tema de que tan extrema debe ser la higiene cuando se trata de los niños.
En el caso del rotavirus sí sirven mucho las medidas de higiene que en realidad no son especiales para los bebés, sino que son medidas que TODOS debemos tener en cualquier momento, como son el lavado de manos, consumir agua potable o hervida, lavar y preparar bien los alimentos y el manejo cuidadoso de los desechos de la casa.
La vida occidental nos ha traido muchos beneficios en ese sentido. El mayor acceso al agua potable, las vacunas y un mayor nivel de eduación en los paises en vías de desarrollo ha contribuido a disminuir la mortalidad infantil en forma importante.
Pero hasta donde es beneficioso mantener la higiene con nuestros niños?. Existe una "hipotesis de la higiene" que apareció en el año 1989, de autoría de David Strachan, quién postula que el aumento de las enfermedades alérgicas y el asma se deben a la cada vez menor exposición a los gérmenes en edades tempranas. Esto debido a las familias más pequeñas, mayores estándares de limpieza y menor exposición a mascotas.
Explicado fácil, el tener una exposición temprana a distintos microorganismos, estimula al sistema inmune de nuestros hijos, lo cual hace que se adapte y sea capaz de responder al momento de enfrentar a los agentes patógenos. Los niños que tienen hermanos, que van a sala cuna o jardín, los que tienen mascotas y los que viven en el campo por ejemplo, estarán inevitablemente más expuestos a distintos gérmenes. Se supone que al no estimular a nuestro sistema inmune, hace que al momento de tener contacto con un agente alérgeno, nuestro organismo reacciona de manera desmedida, produciendo cuadros de alergias y asma. (Por eso estas enfermedades serían más comunes en paises desarrollados).
Y otra vez la lactancia materna sale ganando ya que se ha descubierto que los niños con lactancia materna tienen una flora intestinal diferente a los niños alimentados con biberón.
Imagen obtenida de la web

Esto nos lleva a pensar que el exceso de higiene con nuestros niños estaría lejos de ser beneficioso para su salud (ojo que dije exceso). En mi caso personal, al principio era más fanática, hice toda la parafernalia de lavar toda la ropa del bebé con detergente hipoalergénico, sacar cualquier rastro de etiquetas, todo planchado y casi esterilizado. Mi hijo aún esta con lactancia materna y yo comencé a congelar leche desde el primer momento, asi que también tenía todos los artilugios para esferilizar mamaderas y chupetes.
Sin embargo, con el tiempo (y debido al poco tiempo) yo por lo menos aborté la misión, y en realidad después de los 3 - 4 meses no  tiene ningún sentido esterilizar todo, nosotros los grandes no esterilizamos nuestras cosas, y los bebes a esa altura tienen su flora intestinal lista para responder cuando haga falta. 
Tengo un Golden Retriever que le da besos a mi hijo y reconozco que lo dejo, y es más, ha acariciado a varios perritos (conocidos, por supuesto), se conoce también que los niños que viven con mascotas son menos alérgicos.
El chupete pasa de vez en cuando por un chorro de agua caliente y mi mayor pecado fue un día que  me equivoqué y le eché detergente normal a la ropa del bebé, para mi sorpresa, a mi hijo no le pasó nada.
Otra cosa son las enfermedades respiratorias, mi hijo nació comenzando el invierno y lo saqué bien poco los primeros 3 meses, evite contacto con gente enferma y lugares aglomerados como los mall y lo bañabamos de vez en cuando, no todos los días. Con mi esposo nos resfriamos varias veces y yo incluso hice una bronquitis muy fuerte, sin embargo, no deje de amamantar a mi hijo, no usamos mascarillas y sólo un día decidí no colechar y dormí en otra habitación, pero porque tenía tos y no lo quería despertar. Mi hijo hizo un resfriado leve, un par de mocos y listo.
Creo que estoy aprendiendo a rendirme un poquito con el asunto del ambiente estéril y creo que debemos encontrar el equilibrio justo para efectivamente proteger a nuestros niños, más adelante me tocará lidiar con un niño que querrá comer tierra, comerse la comida del perro, revolcarse en el pasto y todo eso, sé que tendré que controlar mi impulso por sacar a mi hijo de la mugre y  bañarlo con cloro jajaja,  pero debo entender que mi hijo necesita descubrir el mundo, probar y sentir distintas cosas, estimular sus sentidos, eso no lo logrará con la mamá corriendo detrás con las toallitas húmedas jijiji....
¿cuál ha sido tu experiencia al respecto? ¿algún consejo que quieras compartir?, les dejo la reflexión y me retiro leeeeeeeentamente....

Mas información en:

Medicinajoven.com
Bebes con exceso de higiene, bebes menos protegidos

lunes, 5 de octubre de 2015

Rotavirus al acecho!!!

Uno de los microorganismos más temidos por las madres de niños pequeños es el Rotavirus, en especial cuando  (como yo) nos enfrentamos a la realidad de volver al trabajo y de dejar a nuestros hijos en sala cunas o jardines infantiles, donde se verán más expuestos a los distintos "bichos" que existen en la comunidad.
Resulta que el famoso Rotavirus es la principal causa de diarrea aguda severa en niños menores de 5 años. En promedio los niños en Chile pueden presentar entre 2 y 3 episodios de diarrea aguda al año durante los dos primeros años de vida;  y antes de los 3 años casi todos los niños habrán tenido contacto con éste virus. Afecta al 90% de los niños menores de 2 años no vacunados. Además es la principal causa de diarrea aguda intrahospitalaria.
Estos son motivos suficientes para estar pendientes de como se produce esta enfermedad, cuales son los síntomas y como podemos prevenir que nuestros pequeños se vean afectados por este cuadro.

Acerca del Rotavirus 
  • se incuba por 1 a 3 días, es una enfermedad autolimitada (debería mejorar sola)
  • Es de comienzo brusco con vómitos y fiebre durante uno o dos días.
  • Luego aparecen las deposiciones líquidas y frecuentes, generalmente ácidas y de color amarillo que puede durar en 3 - 8 días.
  • Se acompaña de dolor abdominal en incluso algunos síntomas respiratorios, por lo que al principio se puede confundir con cuadro gripal.
  • Todo este conjunto de síntomas puede producir un cuadro de deshidratación que se acentúa en los lactantes.
  • Luego de la primera infección se desarrolla inmunidad y los cuadros siguientes suelen ser más leves.
  • El contagio se produce de preferencia en invierno y primavera.
  • La lactancia materna es un factor protector en niños pequeños.
Es una enfermedad altamente transmisible debido a que:
  • se excreta en grandes cantidades en las deposiciones.
  • sobrevive por mucho tiempo en las superficies.
  • En manos contaminadas puede permanecer viable por 4 hrs.
  • Existen muchos casos asintomáticos.
¿Cómo se contagia?
  • De persona a persona: cuando una persona sana toca a otra persona contaminada con el virus (con materia fecal), y accidentalmente introduce el virus en su boca. (por no lavarse las manos en forma adecuada).
  • Consumo de agua o alimentos contaminados con el virus.
  • Superficies contaminadas.
Tratamiento:
Al ser una enfermedad autolimitada, el tratamiento va más bien enfocado a corregir la deshidratación y las molestias propias del cuadro como son la diarrea y el vómito, además de asegurar que el niño se realimente lo más pronto posible.

Signos de deshidratación:

  • Ojos hundidos
  • Ausencia de lágrimas
  • Sed
  • falta de apetito (rechaza la leche o la comida)
  • mucosas secas
  • El cuadro de deshidratación también produce que el niño se encuentre decaído e irritable, lo cual es muy importante sobre todo en los niños más pequeños que no saben hablar.
La vacuna:
  • Existen dos marcas RotaTeq (3 DOSIS) y Rotarix (2 DOSIS), ambas son  via oral.
  • Entrega una proteccón que va entre el 80% y 90% contra la enfermedad.
  • No son parte del calendario de inmunizacion del gobierno, por lo cual deben ser canceladas aparte.
Prevención:
  • Lavado de manos después de ir al baño o al manipular pañales sucios.
  • Eliminación correcta de pañales sucios.
  • lavar bien frutas y verduras, consumir agua potable o hervida.
  • limpieza de superficies que pudieran contaminarse.
Espero que este resumen sea de utilidad para prevenir y saber identificar un cuadro de Rotavirus en nuestro cachorro, la vacuna es cara, pero creo que vale la pena colocarla y así nos evitamos un gran mal rato. 

Mas información
 Diarrea aguda, escuela de medicina PUC
Rotavirus - CDC




viernes, 2 de octubre de 2015

La tribu

Esta es otra de las palabras que capturaron mi atención cuando me instruí en el arte de ser madre jajaja. Y cuando escuchas la palabra tribu te imaginas a los aborígenes de tierras lejanas del África bailando alrededor de la fogata o algo por el estilo, pero después de leer un par de cositas se entiende como este concepto se aplica a la maternidad.
He estado leyendo algunas cosas que me hacen ruido en la cabeza. Por mucho tiempo se ha luchado por la libertad e igualdad de géneros. Las mujeres hoy tienen los mismo derechos que los hombres, pueden formar parte del mundo laboral, podemos tener poder de consumo, etc. Hemos logrado ser libres y tener voz. Pero en algunos casos parece que nos pasamos de revoluciones y de un momento a otro nos olvidamos de nuestra naturaleza, y a veces ser madre te hace quedar fuera de tus círculos habituales. El convertirte en mamá al parecer no encaja en el cuadro del mundo actual, que es rápido, ambicioso y poco empático, donde te restriegan en la cara "bueno no querían igualdad, no reclames ahora".
En África hay un proverbio que dice que "para criar hace falta la tribu entera", allá los niños no están al cuidado sólo de la madre, sino que de todos los miembros de la tribu. Hoy en día las familias son un núcleo más restringido, los miembros de las tribus tienen su propia vida, preocupaciones y sus propios hijos, ni modo que tengan tiempo de cuidar a los hijos de otro. Entonces cuando entras en el periodo de espera de tu bebé algunos lazos se van rompiendo por las circunstancias y otros van apareciendo. tus prioridades cambian y tu círculo social va mutando, en algún momento te puedes ver rodeada de gente, pero sola igual, porque sientes que ya tus temas no son tan atractivos para las otras personas.
En este momento uno tiene la necesidad de buscar su tribu, puede ser la familia, pero no siempre es el caso, porque no es necesario un lazo de familia, sino que necesitas sentirte comprendida, cómoda y en confianza como para poder apoyar tu hombro o pedir ayuda cuando la necesites.
A mi me pasó algo muy curioso, encontré mi tribu en gente que no conocía. Como leía tanto llegue a lugares en el ciberespacio donde nunca había estado y así conocí a un par de personas que hasta ahora han sido de gran ayuda, personas que son muy generosas al momento de contener y apoyar, personas que evitan la actitud de "yo soy mamá perfecta" al momento de darte un consejo, o sea, algunas no te dan un consejo, derechamente te dicen "es que tienes que hacerlo así", Usted no lo haga, porque usted tampoco es perfecta, si quiere hacer una acotación sea empática y humilde al momento de hacerlo, sino, no joda y quédese callada (si alguna vez yo lo hice, aprovecho de pedir perdón jajaja). A estas personas logré finalmente conocerlas en persona y aún son de gran ayuda en este camino.
Los grupos de madres y talleres varios. Están de moda, no son muy caros y son bien útiles, no se si aprendas mucho, pero sin duda encontrarás gente con quién compartir experiencias, miedos, dudas, etc. Además estos talleres son impartidos por profesionales que han estudiado distintos temas. Yo fui a uno y lo pase bien, finalmente la idea es distraerse un poco.
Tengo además una amiga, desde hace muchos años, pero nunca fuimos taaan confidentes, nunca tanto como ahora. Con los años descubrimos sin querer que nos sentíamos a gusto riéndonos de nuestras desgracias, desde mi tratamiento de fertilidad en adelante empecé a hablar más de lo que habíamos hablado en todos estos años, y el destino quiso que nos embarazáramos con 5 meses de diferencia, lo que hizo aún más entretenido todo. Me gusta ella, porque es real, no pretende ni finge nada, eso me encanta!, me siento libre de sentirme miserable con ella...y lo bueno es que igual terminamos riéndonos un rato de nuestras aventuras.
Y encontré el pedazo de tribu que me faltaba en mis otras amigas, las "tan lejos, tan cerca". Ellas no tienen hijos, pero escuchan pacientemente y me dan una perspectiva distinta de lo que yo veo ahora, y lo mejor es que me hablan de otras cosas, me distraen como mucho éxito de los temas "mamísticos". Con ellas me tengo que aguantar la risa mientras amamanto y veo los mensajes en mi celular. 
Con los años todos vamos descubriendo cosas dentro de nosotros a medida que vamos creciendo, y encontramos afinidades distintas, y cuando creías que ya no conocerías más amigos a estas alturas, aparecen personas nuevas con prioridades parecidas o que simplemente tienen la disposición de entenderte.
Me ha pasado también que gente conocida, no necesariamente amigas de años ni nada, me han pedido consejo acerca de distintas cosas de la maternidad, y eso si que ha sido bonito. Sentirme útil y poder compartir lo poquito que uno sabe de todo este inmenso universo es genial. Me siento feliz cuando puedo ser de ayuda a alguien más, así como mi amiga me enseñó a mi como bañar por partes a mi guagua, cuanta ropa comprar, que pañales eran los mejores etc, etc. Esto es como cadena de favores entre madres y pucha que se agradece.
Finalmente la tribu es este grupo de personas que pueden ser muy distintas entre ellas, puede que las conozcas desde hace años o hace semanas, puede que en el trabajo no compartían mucho, pero ahora tenemos algo en común que nos acerca, no siempre se tratará de encontrar nuevas "mejores amigas", sino que se trata de encontrar un apoyo en personas que sean capaces de contenerte y ayudarte de manera efectiva, desde la pregunta más ridícula, a la duda existencial más grande, un círculo de buenas vibras y comprensión...

¿Cómo lo viviste tú?, ¿donde encontraste tu tribu?
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